Los problemas fuera del campo continúan afectando a Kyle Walker. El jugador inglés ha tenido una Eurocopa 2024 irregular, y algunos sugieren que su rendimiento podría estar vinculado a recientes problemas personales. Hace un tiempo, se descubrió que Walker fue infiel a su pareja y madre de sus hijos, Annie Kilner.
El asunto no solo ha causado revuelo en Inglaterra, sino que también ha seguido al defensor hasta Alemania, donde se disputa la Eurocopa. Según el medio británico The Sun, la seguridad que protege a la selección de Inglaterra recibió instrucciones para asegurarse de que Lauryn Goodman, amante de Walker, no se acerque a la zona destinada a los familiares durante la final del torneo, que será este domingo. Inglaterra enfrentará a España.
“Lauryn es vista como una alborotadora, y la peor pesadilla de Annie es encontrarse con ella”, explicó una fuente al Daily Mail. Esta medida busca mantener la paz y evitar distracciones en el entorno del equipo antes de la gran final.
El escándalo de Walker estalló hace varios meses cuando se reveló que, además de los cuatro hijos que tiene con Kilner, mantenía una relación paralela con Goodman, con quien tuvo dos hijos más.
Este descubrimiento provocó que su pareja desde los 17 años lo echara de casa. En enero, el propio futbolista admitió sus errores públicamente en una entrevista con The Sun, asumiendo la responsabilidad de sus acciones.
A pesar del conflicto, Kilner y Walker se reconciliaron y ella ha estado presente en los seis partidos de la Eurocopa, apoyándolo junto a sus cuatro hijos. Sin embargo, la situación se complicó cuando Goodman también asistió a un encuentro con uno de sus hijos, vestido con una camiseta de Walker que decía “papá” en la espalda. Esta presencia generó tensiones y preocupaciones sobre posibles incidentes en el estadio.