Sam Asghari, el preparador físico que se casó con Britney Spears en 2022, defendió a ésta de las personas que han expuesto la vida personal de la cantante, sobre todo después de que se liberó de la tutela legal que estaba a cargo de su padre Jamie Spears.
En un mensaje que compartió en sus historias de Instagram -y que posteriormente borró-, Asghari, de 29 años, expuso que hay gente interesada en “capitalizar” con los problemas personales de la artista: “La última cosa que quiero hacer es hablar en nombre de mi esposa, eso nunca lo haré. Respeto su privacidad, por eso no hablo tanto. Y me pareció absolutamente asqueroso para las personas que estaban en su vida en ese momento, cuando ella no tenía voz, que fueran y contaran su historia como si fuera la suya. Fue absolutamente repugnante”.
El sitio TMZ acaba de estrenar en Estados Unidos -a través del canal FOX– el documental “TMZ investigates: Britney Spears: The price of freedom”, y aunque Sam nunca mencionaba en su texto ese programa, muchos han asumido que sus quejas estaban dirigidas hacia las personas involucradas en ese proyecto: “¿Cómo vas a tomar a la princesa del pop y meterla en prisión? Su padre le decía qué hacer, qué agua beber, a quién ver y la usaba como una máquina de hacer dinero. Y luego, de repente, después de 15 años, ¿ahora la vas a poner bajo un microscopio y contar su historia?”.
Finalmente, el esposo de la cantante escribió que la cobertura que hacen muchos medios acerca de ella “son clickbaits para hacer dinero. Y ese tiempo terminó. No voy a permitir eso”.