La popular actriz Sharon Stone, protagonista en 1992 de la exitosa película Instinto Básico, entre muchas otras, triunfa ahora como pintora a sus 65 años y expone sus obras por primera vez en la costa Este de los Estados Unidos, a unos kilómetros la ciudad de Nueva York.
La actriz nunca abandonó la interpretación, aunque se le fueron negando papeles después de que en 2002 sufriera un derrame cerebral que le producía inicialmente intensos dolores de cabeza. Por entonces se le diagnosticó una leve hemorragia cerebral provocada por un pequeño aneurisma en una arteria vertebral.
Tras ser intervenida en un hospital, la intérprete se recuperó del derrame sin sufrir secuelas permanentes aunque ella asegura que llegó "casi a morir" y a ver esa luz al final de un túnel que otros en situaciones similares dicen haber vislumbrado, y que es presuntamente la antesala de la muerte. Además, pudo contemplar a su padre, ya fallecido, y escuchar las voces de los dos hijos que perdió durante un embarazo, que, según ella, la animaron a regresar a la vida y a despertar su conciencia.
Aunque Sharon Stone no tardó en recuperarse, y este hecho, además de acabar privándola de alcanzar nuevos papeles, al tiempo animó a la actriz a centrarse en la pintura. En este campo está cosechando éxitos y el reconocimiento de otros artistas. Sus obras han sido elogiadas por Jerry Saltz, uno de los más prestigiosos críticos de arte y ganador del Premio Pulitzer.