¡Su madre y su abuelita! Carolina Castillo sintió la presencia de las mujeres de su vida en Europa
Dos gaviotas se postraron justo a ella - en la ventana- cuando estaba cenando con Pablo. Ella sintió la presencia de su madre y de su abuela, pues eran muy unidas.
¡Wao! Carolina Castillo tiene cuentos pa' echar pa'l aire. Les comento que ella y Pablo disfrutaron de un viaje riquísimo por la Europa Antigua, esto fue el año pasado, pero hasta ahora confiesa lo que vivió en plena cena.
"Coincidencia? No sé si alguna vez les conté esto pero aquí va: El año pasado Pablo y yo disfrutamos de un viaje riquísimo por la antigua Europa. Al terminar el viaje, teníamos una cena en este restaurante de Turquía con una vista espectacular.. y no exagero cuando les digo que yo me sentía muy MUY feliz, aunque mi cara diga lo contrario en la primera foto, pero era de lo cansada que estaba de tanto caminar. Estaba feliz y emocionada de conocer estos países, su cultura, su comida; reímos, disfrutamos, y aprendimos un montón", destacó.
Cenando y realizando todo lo que había vivido en esos días se puso a pensar que le hubiese escrito a su mamá durante el viaje para contarle TODO, pues ella amaba viajar tanto como Caro lo disfruta. "Obvio en ese momento la pensé mucho. Al pasar la cena y después de tomarnos la primera foto, se aparece esta gaviota que tenía una mirada tannn profunda y se me pusieron los pelos de punta al pensar.. será? Será mami que busca la forma de decirme que me acompaña a dónde esté?", destacó.
Al rato llego otra gaviota y pensó que podía ser su abuelita materna con la cual vivió casi toda mi vida. "Nos acompañaron un rato y luego se fueron", dijo.