¡El tiempo de Dios es perfecto! Y Liz Baila lo sabe, porque después de conocer un camino en Cristo, la famosa bailarina y modelo se casará.
Sí, así lo anunció a través de su cuenta de Instagram. En un video se ve claramente cómo Liz llora de felicidad al ver que su "pollo" le pidiera matrimonio.
Fuegos artificiales empezaron a subir al cielo apenas dijo que "sí" quería casarse con el su "pollo". Ella saltaba muy emocionada vestida de azul.
A través de sus historias de Instagram mostró un mini dulce (juguete) de lo que sería parte del festejo. Era nada más y nada menos que de Ariel y su príncipe azul: La Sirenita.
El mini dulce revivía la clásica escena del bote en donde Ariel y el príncipe estaban a punto de besarse y Sebastián le cantaba.
"Dije que sí, obvio que sí, mil veces sí", explicó Liz en el video.
"Te amo y contigo voy hasta el fin del mundo. Siiiiiiiiii acepto casarme y ser tuya por siempre y para siempre", escribió en el pie del video.
Hace poco la famosa destacó que ahora vive feliz porque tiene a Jehová en su corazón: "Ahora vivo feliz porque lo tengo todo, si te tengo a ti Jehová nada me faltará, tú eres el dueño del oro y la plata, del cielo y del mar, creador de las montañas y la tierra. A quien iré si no es a ti?".
El 28 de abril Baila sorprendió a todos al revelar su gran cambio: decidió escoger los caminos de Dios: "Voy a contarles la Liz que verán a continuación es la que van a estar viendo de ahora en adelante, es una Liz que ya está cansada de las fiestas sin fin, de la gente falsa, en ese mundo hay muchos amigos pero cuando realmente los necesitas no están. Ahora actualmente me encuentro en una evolución, todos tenemos derecho a evolucionar y creo que es momento de sentar cabeza y no lo voy a negar me divertí pero cometí muchos errores y es hora de mirar a Dios...", dijo.
Además confesó: "Él me está ayudando a tomar fuertemente el control en mi vida , de mi familia que son las personas que te aman son las que realmente estarán el día de mañana: tu papá, tu mamá , tu pareja, tus hermanos, y algunos pocos amigos son las personas que realmente se preocupan por ti, porque no quieren verte mal quieren verte bien. Me había apartado de Dios: de todo lo que me enseñaron en mi casa , en la iglesia un día, lo guarde lo deje agarrando telarañas pero es momento de sacarlo", contó.
Consideró que estaba haciendo tantas cosas mal, en todos los sentidos , estaba en total desequilibrio, pendiente de cosas que no tenían ningún sentido: "A partir de ahora verán a la misma Liz alegre divertida bailando solo que voy a empezar a mostrar una parte de mí que no estaba lista para mostrar y es la parte vulnerable que como ser humano todos tenemos. Todos cometemos errores lo importante es arrepentirnos y volver e empezar de nuevo con Jesucristo", dijo.